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<???:
"¡Sip, hablo de ustedes!" Diría tras señalarte a tí y a Satella. "¡¿O acaso hay otra pareja de tortolos en los alrededores?!"
La desconocida es una chica de actitud risueña y enérgica... Por no decir que era algo entrometida. Sí bien Satella tenía un presentimiento sobre ella, el cuál era su instinto animal en juego, realmente no es que fuera una amenaza... Para tí, su acercamiento fué con el mero hecho de socializar.
Por otra parte tú acompañante bestia, cerró los ojos. Escuchar las palabras que salía de dicha pescadora era vergüenza e indignación.... ¿Cómo puede confundir su relación sana y fraternal? Esa presunción tan indecente de verte como su pareja o amante le molesta. De hecho, no se guarda nada, la felina encara a la pescadora con una expresión irritada. Cruzó los brazos y por debajo de sus axilas estában metidos sus puños... La pescadora algo confundida llevó sus dedos en el mentón, pensando en que hizo mal para ponerla de esa manera.
<???
"¿A caso dije algo malo?" Levantó la mirada hacia el cielo. "En mis tiempos el rol de una chica era conseguir una buena pareja, para proveer... Sí no son éso, ¿Que son exactamente?" Cuestionó confundida. Ella se limitó a dar una sonrisa bastante boba ante el malentendido que cometió.
Tú acompañante no tarda en poner sus manos en la cintura y con una actitud más calmada le dice.
<Satella:
"Somos familia... No le des más vuelta al asunto."
La pequeña saca el pecho, y con una mirada orgullosa invita a la pescadora a no difundir rumores infundados. En cuanto la pescadora, está se rasca la nuca algo apenada, aunque está más intrigada que tipo de familia eran ustedes dos...
Hermanos, primos, cónyuges... Etcétera?.
Tras tú pregunta, los ojos de la chica se encienden de una alegría inconmensurable, eras su primer cliente del día... Tras un ligero brinco y una exclamación te acerca el bote para que veas
meticulasamente su contenido. A simple vista era pescado sin más, pero había algo fuerte en ellos, quizás el olor...
Con sus dedos te dió el precio. Levantó sus dedos: el índice y el de en medio o corazón.
<???:
"¡Cuestan 2 monedas de plata cada uno!, ¡¡Recién frescos!!" Lo dijo con una animosidad que ni ella misma podía cargar encima. Tanto Satella y tú vieron el momento exacto en que dicha pescadora estába llenando su bote.
Satella te agarra de la manga y de manera disimulada; la pequeña hace un giro con su dedo índice, mostrando totalmente una cara de incomodidad. En palabras estába afirmando que a dicha pescadora le hace falta una tuerca en la cabeza... Al igual que tú no cree que sea conveniente llevarla a Elaf con ustedes.
Tús palabras fueron demasiado efectivas... Cómo sí le hubieras dado un fuerte gancho en el hígado, que inclusive la dejaste en el suelo tirada ante el shock de haber hecho esa pregunta. Su cara era graciosa, era como ver una parodia, un anime o quizás un cartoon que una persona en sí. Realmente ella tenía un secreto guardado en su pecho, pero no cree que sea el momento ni el lugar para revelarlo. Con una expresión abatida se levanta del suelo y, procede a sacudir su capucha y ropa.
Despercute cualquier fragmento de tierra y polvo que haya quedado pegado en su ropa para posteriormente recibir tu generosa oferta... No sin antes darte su nombre.
<???:
"Me llamó: Melusine" Respondió amablemente. "Yo no vivo en Elaf. Resido en la montaña Tritona, en un lugar escondido. A veces solo voy ahí para comprar una que otra cosa y me desaparezco semanas.. ¿Meses?" Contemplaron el cómo contó lentamente sus dedos de una manera bastante torpe.
Sus ojos se iluminaron, y sin si quiera preguntarte sí estabas seguro... La muchacha no lo pensó dos veces y tomó el dinero. De manera inmediata está levito y se fue volando, tú quedaste perplejo, pues no sabías que había ocurrido realmente, pero Satella quién de manera enfurecida le exclama ante.
<Satella:
"
¡¡¡Y no vuelvas a molestarnos vieja bruja!!!" Levantó su codo y ante brazo. Un insulto físico... Acaba de hacer la chica.
Nuevamente miraron el pescado que compraron y esté estába raro. No se veía mal ni olía desagradable, olía a una clase de tinta y estába demasiado brilloso. Quizás esos peces eran creaciones de la bruja o fueron alterados por ella.
Estafados o no, lo mejor era guardarlos, no sabías si dichos objetos servirían para algo. Ahora podías entender mejor el nombre del puente: Concordia. Sin un impedimento tú y la chica cruzaron el viejo puente de madera, el cuál necesitaba mantenimiento al estar bastante oxidado de los clavos y una que otra tabla salida o faltante.
No hubo mas problemas, por fin salieron del ambiente de estepa para adentrarse en un lugar más acorde a un bosque de corniferas. Tras media hora de caminata llegaron a una entrada, una construcción en arco enorme que tenía el nombre grabado: Elaf. Satella te volteó a ver con una expresión alegre y con una total seguridad te tomó de la mano para llevarte al interior de la ciudad.
El sol seguía iluminando con una buena intensidad mientras las nubes pasaban por el lugar. Por la posición del sol te percataste que aún era medio día, así que tenías la oportunidad de pasear por el lugar junto a Satella. El poblado estaba construido por cazas de madera y piedra caliza. Solo los ricos tenían hogares hechos de puro concreto... Como el castillo de su majestad. Las carreteras y calles eran empedradas en su mayoría y habían muchas escaleras de concreto que facilitaban un poco el subir sin agobiarse, ya que habian partes altas...
Tras observar uno que otro espacio verde llegaron al centro de Elaf. Y con curiosidad tú compañera te pregunto lo siguiente...
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<Satella:
"Bueno esa bruja nos timo 500 monedas, pero aún podemos quedarnos unas dos noches en una posada, tenemos los pescados y las pócimas como trueque, podemos sobrevivir unos días más. ¿Dime a dónde quieres ir?" Señaló directo a la posada, el bar, la tienda, y el gremio. "Creo que un descanso no está mal..." Comentó tras avanzar unos pasos hacia la posada, pero era tú elección escoger dónde ir primero.
Además con lo de hace rato debías ingenierte la manera de recuperar 500 monedas de plata o más
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Inventario:
500 monedas de plata.
20 Mojarras para nada comestibles (Aumenta tu ataque en 30+)
5 Sardinas de dudosa procedencia (Debilita al oponente con tan solo olerlas) (Aplica el estado de alterado)
3 posiciones (Restauran +200 de HP)
1 Sable
°Sable mortal Akantor
Ataca dos veces.
Inflige estado de stun al enemigo (efectivo sí suerte es mayor a 50) (útil cuando ignoran evasión o piden mayor a)
+20 en inteligencia (Exclusivo en Extranjeros)
X2 en fuerza (1d100 en ataque)
1 Sopa hecha con mucho amor (Restaura el HP por completo) (Sazón de Satella: Aumenta la precisión en 30)
2 Llaves (Abren cualquier tipo de puerta. Dos usos, usalas bien)