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- Si, tienes razón, simplemente esto es demasiado sorprendente, este tipo de cosas se deben tomar con calma -
Le "confesó".
Sobre Ham, bueno, su especialidad es adaptarse a las situaciones, su trabajo le obliga a siempre tener una expresión ganadora, en cada lugar, en cada situación, incluso cuando el cañón de un arma se ha pasado en su frente siempre tiene la escena analizada para resolver el problema, incluso si FUESE capaz de cometer un error lo resolvería de inmediato, su vida en un general no es más que un buen día en la obra más barata de un escenario en Broadway, ha estado tanto tiempo en esto que es casi seguro de que se olvidó cuál era su verdadera personalidad...
Sobre la chica, pues, si, era bastante hermosa, vamos, no tanto como Catherine del distrito rojo, ella si es una belleza en todo su esplendor, una chica puede ser bonita, cuidar de su piel, tener buena figura y oler bonito pero todo esto no es más que un complemento para atraer lo que ese carácter esconde, siendo sincero, o quizás no, leer a una mujer es bastante difícil pero has de prestar atención en cada detalle si quieres evitar ser devorado, lo que podía notar era a una chica bastante complaciente y sincera, inteligente pero así también fácil de manipular, bastante amigable y la coquetería no podía faltar, era del tipo que intimidaba aunque no lo quisiera y lo sabía bien, la forma en la que requería contacto físico lo gritaba pero no parecía ser mala persona, solo algo torpe al forzar verse como alguien interesante. Asentí un par de veces con mi genial análisis, el negocio me pide hacer esto con cada persona que conozco, en este punto es algo involuntario...
- Jerusalén, dicen que es un buen lugar para ir en estas fechas -
Dije con las manos en los bolsillos dejando que la chica se adelantará y presentará a la tal Da Vinci...
Llamar a tu hija como uno de los más grandes inventores del renacimiento era al menos, curioso pero tenía estilo, esa pequeña era bastante curiosa y de cierta forma con solo unas palabras logro carne algo bien, subía en el top de mis personas favoritas hasta el momento quedando por encima de la tal Shielder.
- ¿Calidad? Tenía un benefactor que me decía lo mismo -
Le dije quitándome el sombrero y colocándolo en mi pecho para agradecer.
- Sobre la magia... -
Me puse mi sombrero y exhale enrollando mis mangas...
https://youtu.be/899kstdMUoQ?si=yDxFyrrh51371MJT
Le mostré las palmas de mis manos vacías y en un movimiento rápido le enseñe una moneda, la movi entre mis dedos y luego la lance a mi otra mano solo para mostrarle que está ya no estaba ahí, estire la mano hacia la niña jalando levemente su oreja para mostrarle como la moneda aparecía detrás de esta para luego lanzar la moneda al aire y abrir la boca para atraparla y simule tragarla, saque la lengua mostrando que había desaparecido nuevamente, me lleve la mano a la nariz y sople haciendo que la moneda cayera al suelo.
- Taran~ -
Me incline levemente hacia adelante agradeciendo la atención.
- También puedo hacer trucos con naipes -
Un show man, esta claro que eso es, Ham siempre puede sacar algo interesante de su bolsa trasera, saber un poco de todo es bueno para el negocio, desafortunadamente mis trucos baratos no se comparaban a lo que se guardaba detrás de aquella puerta...
Era pura fantasía, la típica escena de una película de ciencia ficción con todas esas luces y gente tecleando rápidamente como si de verdad estuviesen haciendo algo pero aquello que llamo por completo mi atención no fue el claro caos del lugar si no esa esfera en llamas que se proyectaba enmedio de la habitación, la tierra, esto era algo serio ¿Verdad?
- Disculpa, Da Vinci... Entiendo que está cosas es la tierra... ¿Que fue lo que pasó para que terminara así? -
Pregunté sin quitarle los ojos de encima.